Pepe Mujica dijo que su cáncer está “localizado” y rechazó tratarse fuera de Uruguay
El ex presidente de Uruguay, José “Pepe” Mujica, sorprendió al revelar que está batallando contra un cáncer de esófago. En un encuentro informal con amigos y dirigentes, este miércoles compartió detalles por primera vez sobre su estado de salud, su enfoque positivo ante la enfermedad y tratamiento que hará en su país, descartando la posibilidad de viajar a Estados Unidos.
Mujica describió su condición como “localizada” y expresó su confianza en los médicos uruguayos para tratar su enfermedad, rechazando la opción de recibir tratamiento en Estados Unidos. “Confío en los médicos uruguayos, no me voy ni a la esquina”, afirmó.
El pasado lunes, el líder del partido Movimiento de Participación Popular (MPP) sorprendió en una conferencia de prensa al anunciar que padecía cáncer en el esófago, generando conmoción tanto a nivel político y social. En ese momento definió a la enfermedad como “doblemente compleja”, ya que se suma a otros padecimientos como una condición inmunológica y una afección en los riñones, lo que dificulta sus posibilidades de tratamiento.
Pepe Mujica: “El cáncer está localizado”
Mujica, un líder político conocido a nivel internacional por su estilo austero, dio detalles de su estado de salud después de que se le diagnosticara cáncer de esófago la semana pasada durante un chequeo médico de rutina en el centro médico Casmu, ubicado en Montevideo.
“Me han hecho chequeos de todos lados, el asunto está localizado y es un tipo de variante celular que es muy atacable por radiación. Es casi seguro que el tratamiento que me van a imponer es radiación“, dijo el expresidente uruguayo en diálogo con la prensa, este miércoles 1 de mayo.
Además, compartió detalles sobre cómo el cáncer afecta su dieta diaria y, a pesar de las restricciones, mantuvo su característico sentido del humor, bromeando sobre licuar sus alimentos a la parrilla.
“Yo comeré una sopita, no puedo comer grande porque después me duele la panza“, compartió, entre risas, después del asado que compartió este mediodía con su esposa, Lucía Topolansky Saavedra, dirigentes y amigos, incluido el músico Rubén Rada.
En paralelo, Mujica agradeció las muestras de apoyo recibidas de personas de todos los ámbitos políticos, tanto local como internacional, destacando la solidaridad incluso de aquellos con quienes tuvo diferencias en el pasado. “Qué lindo es ser uruguayo”, agregó, emocionado.
Con 88 años, Mujica reflexionó sobre la fragilidad de la vida en virtud de la nueva enfermedad que amenaza su estado de salud. “Todo lo que nace, nace para morirse. Hay que aceptarlo“, afirmó. En esa línea, el expresidente uruguayo instó a agradecer a la vida y se comprometió a vivir cada momento al máximo. “Voy a empinar el vaso de la vida hasta el último minuto”, prometió.
Asimismo, reconoció su historial de salud, marcado por enfrentamientos con la muerte en línea con la enfermedad inmunológica que padece hace dos décadas y que le afectó los riñones. Pero, tal como acostumbra a mostrarse en público, mantuvo una actitud optimista. “Estoy viviendo gratis“, declaró con su habitual franqueza.
Fuente: Perfil