El Club de los Gremialistas con hijos contratados en Salud (III): UPCN, la pata que faltaba
Los trabajadores de la Salud de La Pampa pueden tener la certeza de que al menos un sindicalista por cada uno de los tres gremios que los representaron en las paritarias sectoriales entre 2015 y 2017 consiguieron lo que fueron a buscar de la patronal: trabajo para sus hijos.
A la lista que componen Carlos Ortellado y Mirta Viola (SITRASAP) y Liliana Rechimont (ATE), se les suma Alberto Chirino, el secretario Adjunto de UPCN provincial, que también consiguió conchabo para su vástago. Ortellado y Viola lograron que un hijo de cada uno fueran contratados en el Hospital Lucio Molas, el mismo destino que uno de los hijos de Rechimont, que también pudo ubicar una hija en el centro de Salud del Barrio Aeropuerto. Chirino consiguió que el suyo encontrara un lugar en el Hospital Gobernador Centeno de General Pico.
Los hijos de los cuatro gremialistas estatales fueron contratados en la plantilla de Salud Pública provincial, luego de que sus padres arreglaran condiciones con el ex ministro Rubén Ojuez.
Una suma de sensaciones, la mayoría emparentadas con la indignación, ya produjeron las dos primeras partes de este informe. Es que los trabajadores de ese sector tan sensible pudieron comprobar que sus “representantes” en las mesas sectoriales en realidad estaban sentados con los patrones que habían conchabado a sus hijos, por lo tanto es dudosa la defensa que pueden haber realizado de los derechos de los demás trabajadores, o sea todos los que no eran sus cuatro hijos.
Obviamente que la masa trabajadora estatal pampeana desconocía este hallazgo, hasta que lo publicó en exclusiva y en soledad Diario La Campana y se viralizó en las redes sociales.
Para tranquilidad de los trabajadores del sector, siguen siendo representados por los mismos sindicalistas. en los últimos días se hicieron ver encabezando conferencias de prensa, en reclamos por más derechos y mejoras laborales para los empleados.
No son pocos los que le reconocen el mérito a Juez de haber sabido entrar la medida -o el precio- de los paritarios sectoriales con los que sentaba a negociar el presente y futuro de los trabajadores de la salud. No es casual que durante su gestión no tuviera ningún conflicto gremial.