Todo por un huevo
Probablemente el profesor Aníbal Prina nunca haya imaginado que el huevo lanzado al auto presidencial de que se lo acusa sería uno de los pretextos que encontró el Gobierno Nacional para que expertos israelíes capaciten a la custodia de Mauricio Macri y otros funcionarios. La Casa Rosada admitió preocupación por los escraches a los que se vió expuesto el mandatario, cuando aún no cumplió dos años de gobierno. Lo que es seguro es que decidieron aumentar la capacidad de respuesta de los custodios y fuerzas de choque oficiales, en vez de cambiar las políticas sociales y económicas que motivan los escraches.
En medio de la creciente preocupación de la Casa Rosada por los escraches que sufrió Mauricio Macri en los últimos tiempos, el Gobierno decidió tomar cartas en el asunto y avanzó hacia un objetivo concreto: el personal de la custodia presidencial recibió una capacitación especial de un grupo de profesionales de las fuerzas de seguridad de Israel, uno de los países que mayor capacidad profesional tiene para enfrentar ataques terroristas y atentados contra jefes de Estado.
Según pudo saber Infobae, los ejercicios se realizaron en forma sigilosa la semana pasada y además de los custodios de Macri, se incluyó al personal de seguridad de la vicepresidente Gabriela Michetti, del jefe de Gabinete, Marcos Peña, y de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
“Los ataques y escraches que recibió el Presidente son una realidad que no se puede ocultar. Ante esto, se decidió mejorar la capacidad de acción de los custodios de la Presidencia”, explicó un funcionario del Gobierno que siguió de cerca el curso de capacitación de las fuerzas especiales de Israel.
Entre los ejercicios que realizaron los custodios del área de Presidencia, hubo capacitación para el manejo de armas, entrenamiento de tiro, defensa personal y logística en caso de atentados terroristas.
Desde la diplomacia israelí ratificaron a Infobae la realización de estos ejercicios y destacaron que esto forma parte de “los prósperos vínculos de cooperación existentes entre la Argentina y el Estado de Israel”. También aclararon que el curso de capacitación para el personal del área de Seguridad del Presidente de la Nación forma parte de un programa para combatir el terrorismo a nivel mundial y de protección de dignatarios en casos de ataques externos.
El curso de capacitación duró una semana y también participaron altos funcionarios de la Policía Federal. El dictado de esta capacitación estuvo a cargo de personal de seguridad de la embajada de Israel y de miembros de las Fuerzas de Seguridad que vinieron expresamente de Tel Aviv.
“Recurrimos a una fuerza especial de lucha contra ataques a dignatarios como es el caso de Israel porque ellos tienen mucha experiencia y formación en este tema, con métodos de combate específicos y una historia muy conocida en términos de lucha contra el terrorismo”, añadió la fuente de la Casa Rosada consultada.
Por otra parte, la diplomacia israelí aclaró que también hubo un intercambio de experiencias con los uniformados argentinos teniendo en cuenta los ataques terroristas que sufrió la Argentina con los atentados a la AMIA y a la embajada de Israel.
Las fuerzas de seguridad israelíes no son una más en el universo de la custodia a jefes de Estado. Se trata de una fuerza muy capacitada que resguarda la integridad física de uno de los hombres más custodiados del mundo como es el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.
La decisión de la Argentina de instruir a la custodia presidencial con esta fuerza especial de Israel se dio luego de los reiterados casos de escraches y actos de vandalismo que recibió Macri entre el año pasado y este.
Por caso, en octubre último un profesor universitario y ex candidato kirchnerista fue detenido por la Policía Federal como uno de los responsables de haber agredido a la comitiva presidencial en La Pampa.
Este individuo había insultado y arrojó huevos contra el auto en el que viajaban Mauricio Macri y sus asesores tras un acto en Santa Rosa.
En febrero de este año, el Presidente también fue agredido en Viedma cuando se encontraba en un acto con funcionarios de Río Negro. El hecho tuvo como protagonistas a representantes del gremio de ATE de esa provincia y fue detenido más tarde el secretario de ese gremio, Rodolfo Aguiar.
En junio de este año también hubo un incidente cuando una persona intentó ingresar con un auto a la Casa Rosada. El hecho generó el despido de toda la custodia de la Casa de Gobierno que estaba de turno ese día.
Además, en diciembre del año pasado, un grupo de alrededor de 10 personas lanzó piedras al vehículo en que se desplazaba el Presidente hacia un acto de inauguración del Centro de Interpretación e Información Turística de Villa Traful, provocando la rotura de dos vidrios del auto en que viajaba Macri. No fue la primera vez que Macri tuvo problemas en Neuquén. Ese año suspendió tres visitas a la provincia para esquivar una protesta de estatales. Además, el Presidente recibió dos alertas de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), una en octubre y otra en noviembre, por posibles incidentes en Neuquén.
Todos estos antecedentes resultaron más que suficientes para el Gobierno a la hora de decidir una capacitación de la custodia presidencial con una de las fuerzas más entrenadas en ataques a dignatarios como son las de Israel.