¿Yo? argentino…
Los vecinos de la Asamblea por el Agua fueron recibidos esta mañana por el secretario de Obras Públicas del municipio santarroseño, Mario Cortina. Los manifestantes se congregaron frente al edificio comunal y realizaron una aplaudida, luego fueron notificados de que los recibiría el funcionario municipal.
Cortina abundó en explicaciones técnicas, pero no aseguró ninguna solución en el corto plazo.
Como es la costumbre del intendente Leandro Altolaguirre y todo su staff, el titular de Obras Públicas decidió cargar toda la responsabilidad de la falta del suministro del líquido vital en los hombros de la provincia. Eso sí, omitió o se distrajo al momento de asumir que es el Municipio que él representaba en ese momento el que cobra y presta el servicio de agua potable a los vecinos.
A pesar de desviar las responsabilidades hacia la empresa mixta Aguas del Colorado, antes de que se lo recordaran, fue el propio Cortina el que aceptó que él es parte del Directorio de AdC. Es de suponer que, como funcionario santarroseño comprometido, si no está de acuerdo con el accionar de Aguas del Colorado, presente su renuncia al cargo de Director de la empresa, obviamente que tendría que renunciar también a la remuneración de cerca de 40 mil pesos que percibe de la empresa mensualmente.
Lo más curioso del caso es que no brindó ninguna respuesta concreta a los vecinos, sí elaboró una serie de teorías de lo que tendrían que hacer las autoridades antes de entregar viviendas sociales.
En definitiva, los vecinos se fueron sin un resultado concreto, pero con muchos “si se hiciera tal cosa…”. Todas promesas y elucubraciones ofrecidas a muy pocos centímetros de las cajas con sobrecitos de golosinas que repartirán los funcionario municipales disfrazados de Reyes Magos. Probablemente Altoloaguirre aproveche la oportunidad para ataviarse con prendas del lejano oriente y visite algunos barrios, con la esperanza de no ser reconocido.
También se debe destacar la magra convocatoria de la Asamblea del Agua. Apenas una veintena de personas concurrieron al edificio municipal y a pesar de que se había aclarado en la convocatoria que no permitirían que nadie llevara este reclamo como rédito para alguna parcialidad política, entre los presentes estuvo la concejala humanista Alba Fernández.
Fue notoria la ausencia de instituciones barriales como las comisiones vecinales, puesto que en el área de influencia de la mayoría de ellas se registraron problemas con el suministro de agua potable.