Toffoni: 3 años en suspenso
Sebastián Pais Rojo dijo que la sentencia que dejó en libertad a Toffoni, revela que “hay imputados distintos” y que atiende a la demanda de un sector social que pide mano dura. Apelarán la sentencia en el TIP.
El representante de la querella en el juicio contra Leonardo Toffoni, Sebastián Pais Rojo, criticó el fallo de tres años de suspenso contra el despensero que asesinó a Nicolás Pescara, de 20 años, en un hecho ocurrido en el año 2014.
Al hacer el análisis de la sentencia, Pais Rojo dijo que “a nuestro criterio, son como dos partes. Primero la parte como construye la figura penal. Para nosotros, lo que probó el juicio, es que se trató de un homicidio simple, además de la portación del arma de fuego, entendemos que se trató de un homicidio simple”.
“En el alegato, aclaramos que no es que Toffoni se va la noche anterior a dormir, pensando en matar a un pibe o que se incorpora de la cama, a las 6 de la mañana, pensando en eso, pero desde el momento en que la reacción es ver que algo pasaba en su comercio, a treinta metros y salió, aún sin saber si venía la policía o no y tomar un arma de una mesa de luz, que tiene al lado, uno integra cualquier escenario posible”, explicó en declaraciones radiales al programa “Despertando a la Trama que se emite por Radio La Tosca.
“El tribunal entendió —y es uno de los principales puntos en que estamos en disidencia— que Toffoni quería contenerlos hasta que llegara la policía. Es una lectura ingenua. No solo caminó treinta metros con un arma cargada que tenía en una mesa de luz, sino que termina disparando al pecho, a un metro y medio de distancia”, dijo.
“El tribunal usa la figura procesal del arresto ciudadano. Una cosa es cruzarse en el medio de la calle con alguien que comete un delito o sorprender a alguien en la propia casa, que tampoco exime la discusión sobre la tenencia de armas, pero en cualquiera de esos escenarios, se atenderían otras cuestiones. Pero en este caso, era escuchar los vidrios rotos, llamar a la policía y quedarse en la casa”, dijo.
“Si no, lo que estamos diciendo es que el ímpetu es que si tiene que actuar, actúe, y si tiene un arma vaya. El Tribunal concluye un exceso en la legítima defensa y discrepamos profundamente, ya que nos parece peligroso como mensaje.
“Luego la segunda parte, aún con lo que dice tener probado, que hay una agresión de Nicolás, que Toffoni se defiende o se excede cuando hace un disparo lesivo, aún con todo eso, el tribunal termina con una escala de un año a diez y en la segunda parte, hace un esfuerzo, para construir una escala que le permita darle una pena que no sea de prisión”, criticó.
“Y después, va buscando y pareciera que forzando razonamientos de atenuantes, con este pobre hombre, padre de familia, trabajador y despensero, para llegar a los tres años que le permita darle una pena en suspenso. Ese tipo de construcción no se ve en las causas cotidianas de los clientes en el Sistema Penal. Y ahí, viene la segunda parte y por eso digo que el mensaje de la sentencia es clasista”, criticó”.
“Ese mismo construcción de no someter a la persona a más cosas, no se ve con los imputados medios en las causas del sistema penal. Es decir que el propio estado elige a quien somete al sistema penal y ahí decimos que la vara, cambia”, afirmó.
“Uno está cansado de ver sentencias en donde los jueces se paran en la mitad de las escalas de pena, se paran en el medio y ven atenuantes y agravantes. Acá se arrancó con el mínimo y esto no se corresponde con lo que se ve sistemáticamente con los imputados medios”, criticó.
“Además, el Tribunal destaca que notó mucho arrepentimiento. Es una cuestión de percepción. Nosotros no vimos eso. Vimos un Toffoni conmovido durante dos días de juicio por lo que le estaba pasando a él, genuinamente, no vimos otra cosa”, dijo.
“En la expresión de arrepentimiento por la muerte de Nicolás y el pedido de disculpas al padre, se da después de nuestro alegato, en el que puntualizamos que no habíamos visto tal arrepentimiento”, dijo.
“Ahí hay otra pauta de la sentencia. El tribunal dedica página y media a las cuestiones morales del imputado, que representa a una parte de la sociedad y le dedica un renglón y medio para medir la extensión del daño, para decir solamente que estamos ante un hecho irremediable. Eso también marca una diferencia del análisis y no nos aparece como dato casual”, dijo.
Sebastián Pais Rojo dijo que se esperaba un mensaje contrario en la sentencia. “Ellos dieron el peor mensaje, sobre qué pasa cuando uno tiene un arma en la casa, qué pasa cuando sale de su vivienda, sin pensar que hace con un arma cargada y mata a un pibe de 20 años y dieron el peor mensaje, que hay imputados distintos”, criticó.
—¿Van a apelar esta sentencia?
—Sí. Tenemos diez días hábiles para presentar un recurso de impugnación que deberá resolver el Tribunal de Impugnación y entendemos que la Fiscalía hará lo mismo, que no se va a conformar con esto, sino como representantes de la sociedad, estarían dando un mensaje. Hay que esperar lo que resuelva el TIP y que no reproduzca la misma sentencia.
En un medio como este, se dicen cosas y en este caso, se dijo demasiado. Como si levantar una parte del sentir social, donde hay sectores que apelan a la necesidad de defenderse, del hartazgo de los pibes que afanan y esta sentencia le da respuesta a eso. En un momento, en que estamos volviendo a discutir la sentencia institucional por parte del Estado, tenemos la sentencia que dice que los particulares pueden defenderse armados y nos pone en una situación compleja del tejido social”, expresó.
Como se recordará Leonardo Toffoni, ultimó a Nicolás Pescara, el 4 de mayo de 2014 con un disparo de arma de fuego, cuando lo sorprendió en su comercio, alrededor de las 6 de la mañana, en Libertad y Tomás Mason.
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